La Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), emitió un contundente comunicado firmado por los secretarios Generales donde afirmaron, entre otras cuestiones, que no están dispuestos a retroceder un solo paso en sus conquistas por decisiones unilaterales del Gobierno.

El escrito presentado por los secretarios Generales que conforman la Federación de Educadores bonaerense, le solicita a los gobiernos nacional y provincial que convoquen a los gremios del sector a discutir de manera urgente los aumentos salariales correspondientes a este año.

“La negociación colectiva paritaria se ha constituido en un instrumento imprescindible para garantizar el derecho de los trabajadores a sentarse como pares con sus empleadores, a fin de conformar sus salarios y sus condiciones de trabajo. Sin embargo, en los últimos años, asistimos con asombro y desazón a la desnaturalización de este instrumento a través de decisiones unilaterales del Gobierno Nacional y Provincial que no aceptan negociar y que, ante la menor posibilidad de conflicto o falta de conformidad por parte de los gremios que representan a los docentes, deciden imponer su decisión a través de decretos”, reza el comunicado.

Asimismo, también indica que “por este motivo, los secretarios Generales de las Entidades de Base que conforman la FEB, rechazamos categóricamente esta actitud de nuestros empleadores, que ignoran la voluntad de sus trabajadores manifestada a través de las organizaciones sindicales que los agrupan, generando una grave embestida contra los derechos garantizados no solamente por las leyes nacionales y provinciales, sino también por todos los convenios internacionales. No vamos a consentir que se violenten nuestros derechos. Queremos ser escuchados, queremos ser parte en la conformación de nuestro destino como educadores. No estamos dispuestos a retroceder un solo paso en nuestras conquistas por decisiones unilaterales del Gobierno”.

Desde FEB, además, pidieron terminar con la imposición unilateral de la voluntad de su empleador, así como también un aumento del Salario Básico, y una cláusula de revisión del acuerdo, conforme al comportamiento inflacionario.

“Aún en un contexto económico complejo como el actual -que no generamos pero que sí nos hacen pagar-, confiamos en nuestra capacidad de negociar con nuestros empleadores”, finaliza.