En sintonía con lo expresado por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) emitió un comunicado para excusarse sobre la repentina suspensión de los informes oficiales sobre los índices de pobreza e indigencia.
El organismo gubernamental, en sintonía con lo expresado por el jefe de Gabinete, aseguró por medio de un comunicado que desistió de la publicación de los índices de pobreza e indigencia por “severas carencias metodológicas” tras los cambios en el índice que mide los precios al consumidor.
“Como es de público conocimiento, el INDEC modificó a partir del mes de enero de 2014 la metodología de elaboración del índice de precios al consumidor, pasando de medir precios en el Gran Buenos Aires a hacerlo en la totalidad del país. Este cambio constituye un salto cualitativo en la federalización de los índices de la economía nacional. En el día de ayer se discontinuó la publicación de la serie histórica de la medición de incidencia de pobreza e indigencia por ingresos monetarios que el instituto estadístico venía realizando desde 1993 por contar con severas carencias metodológicas, sumadas al hecho de la discontinuación del IPC-GBA y la imposibilidad de empalme con el nuevo IPC-UN”, reza el texto difundido.
En ese sentido, desde el INDEC aseguraron que actualmente se encuentran trabajando, en conjunto con otros organismos, en nuevas metodologías que permitirán caracterizar de manera más eficiente las condiciones socioeconómicas de la población en el conjunto de las regiones que componen el país, con el objetivo de continuar proveyendo de instrumentos confiables que permitan el diseño e implementación de las políticas públicas.
“La medición oficial de la pobreza y la indigencia por el método de la línea de pobreza según unidad adulto equivalente se realizó sistemáticamente en Argentina a partir del año 1993, según lineamientos trazados por la Secretaría de Programación Económica del Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos”, advirtieron.
Por otra parte y en relación a la metodología adoptada, señalaron que “se basó en los valores del Índice de Precios al Consumidor del Gran Buenos Aires (IPC GBA), tanto en el período en que la medición de pobreza e indigencia abarcó sólo la región Gran Buenos Aires (1993-2001), como en los períodos posteriores en que la medición alcanzó a todos los aglomerados urbanos relevados por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH)”.
Asimismo, indicó también que la ampliación de las estimaciones se realizó mediante la llamada metodología de transición por la cual, ajustando los valores de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y Canasta Básica Total (CBT) de la región Gran Buenos Aires según los coeficientes surgidos del estudio de Paridades de Poder de Compra del Consumidor de 20011, se calculan las líneas de pobreza e indigencia de las restantes regiones.