La Cámara Laboral confirmó el despido “con causa” (sin derecho a indemnización) de un chofer de la línea 161 de colectivos que a finales de 2008 causó un choque en cadena cuando conducía alcoholizado.
El tribunal desestimó los planteos del conductor despedido contra los peritajes que arrojaron como resultado que tenía “3.20 gramos de alcohol en sangre”, cuando por su condición de chofer de transporte público el nivel debía ser cero.
Para un conductor particular, el máximo permitido es de 0,5 gramos, es decir, que aún con ese parámetro el conductor del colectivo sextuplicaba el guarismo tolerado por la ley de tránsito.
La Sala Quinta de la Cámara Laboral, con las firmas de los jueces Oscar Zas y Enrique Arias Gibert, avaló la decisión de la empresa Transportes Larrazabal S.A., que administra la línea 161, contra el chofer.
La empresa resolvió el 13 de enero de 2009 el despido, argumentando “el actor protagonizó un accidente al colisionar violentamente con la parte delantera de la unidad a su cargo con el automóvil particular marca Peugeot 206 en circunstancias en las que no se encontraba en condiciones de aptitud psicofísica para prestar servicios y menos aún para conducir un transporte público de pasajeros”.
El estado de embriaguez representó una conducta “demostrativa de la total negligencia y desaprensión en la ejecución de la tarea encomendada y resultando de todo ello que el mencionado accidente y sus dañosas consecuencias podrían haberse evitado si hubiese actuado de buena fe, ajustando su conducta al debido cumplimiento de sus obligaciones contractuales cuidando y manteniendo en todo momento el control del vehículo”.
El siniestro ocurrió en el tercer carril de la Avenida Cabildo, cuando el colectivo impactó al Peugeot 206 y le causó “daños en la parte trasera y delantera” porque lo arrojó contra un Fiat Palio.
Un oficial policial que intervino ante el siniestro comprobó que “el conductor del colectivo se encontraba a simple vista altamente alcoholizado, expidiendo un intenso aliento etílico y una evidente descoordinación en el habla y en sus movimientos”.
Además, tenía “la licencia de conductor vencida” y causó lesiones a dos personas.