El tribunal oral número 21 concedió una prórroga de la situación de “detención domiciliaria” del ex número dos del gremio ferroviario Juan Carlos “Gallego” Fernández, condenado por el crimen del militante del PO Mariano Ferreyra, en tanto que aún no resolvió un pedido similar formulado por el ex líder sindical José Pedraza.
Ambos condenados plantearon la prisión domiciliaria en relación con sus respectivos cuadros de salud, pero mientras Fernández obtuvo un permiso para recuperarse en su domicilio de una operación de triple by pass coronario, Pedraza aún está a la espera de informes del Cuerpo Médico Forense que determinen si su cuadro de salud corre riesgos de deteriorarse en prisión.
Fernández fue sometido a una operación coronaria en una clínica de Quilmes y los médicos consideraron que el Hospital Penitenciario de Ezeiza no estaba en condiciones de asepsia para que haga allí el post operatorio, por lo que le permitieron permanecer detenido en su casa por 30 días.
Vencido ese plazo, el tribunal concedió una prórroga y el “Gallego” interpuso un planteo formal para cumplir en su casa el resto de la condena a 15 años de prisión que le fue impuesta.
El tribunal está a la espera de la remisión de informes técnicos y médicos sobre la situación de Fernández, al igual que ocurre con Pedraza, quien padece diabetes y afecciones que comprometen incluso su equilibrio cognoscitivo.
Ambos casos podrían resolverse antes de fin de agosto, según evaluaron fuentes con acceso al expediente.