El diputado socialista Joaquín Blanco presentó en la Legislatura de Santa Fe un proyecto de ley para multar y hasta interrumpir el servicio telefónico a quienes llamen para hacer chistes.
Blanco explicó que “mientras los vecinos intentan comunicarse al 911 para denunciar un ilícito, hay cientos de ciudadanos que cada día ocupan esa línea para hacer bromas”.
El texto propone modificar los artículos 25 y 59 de la ley número 10.703 Código de Faltas de la provincia de Santa Fe.
Quien “hiciere uso indebido de toques, señales u otros medios reservados por la autoridad para los llamados de alarma, régimen interno de sus dependencias, vigilancia y custodia que aquella deba ejercer, será reprimido con multa y arresto de hasta 30 días”, propone la iniciativa.
Según el texto del proyecto, “la pena se aplicará al titular de la línea telefónica que provocare o intentare provocar, sin causa fundada, la concurrencia de la policía, del cuerpo de bomberos, defensa civil, servicios de emergencia o de cualquier otro servicio análogo a sitios donde no sea menester”.
Blanco ya había presentado un proyecto similar hace unos años en la Cámara de Diputados, donde se lo aprobó, pero perdió estado parlamentario al no ser tratado en el Senado provincial.