El juez penal de instrucción Diego Slupski procesó con prisión preventiva y dispuso el encierro en el penal de Marcos Paz de un joven acusado de haber baleado a una embarazada de siete meses, causando la muerte del bebé, en el barrio Papa Francisco, poco antes de que fuera concretado el desalojo del lugar.
Se trata del hecho ocurrido el 20 de julio pasado cuando, después de cometer un robo de una de las precarias viviendas del barrio de emergencia, cinco agresores dispararon en su huida contra Sonia Angles Quispe, embarazada de 32 semanas, quien recibió un tiro en el abdomen y dos en sus piernas.
El juez Slupski procesó a uno de los cinco agresores, identificado como Héctor Daniel Ríos, quien figura como “panadero” en el expediente, y ordenó la detención de los otros cuatro, quienes permanecen en calidad de prófugos.
Ríos, quien tenía pedido de captura por parte del juez Slupski, fue detenido por la Policía Metropolitana en un operativo de rutina cuando acompañaba a una persona que portaba un arma de fuego.
Según la descripción de los hechos, en la madrugada del 20 de julio Ríos, su hermano Lucas Abraham, Gustavo Andrés “Orejas” Aponte, “una mujer conocida como Macarena y otro sujeto no individualizado” ingresaron a una precaria casilla del barrio “a los fines de apoderarse de los bienes de valor que se encontraban en su interior”.
“Rompieron la malla metálica perimetral y desprendieron con fuerza los clavos del techo de lona que cubría la vivienda”, añade la descripción, que detalla que amenazando con armas de fuego a la mujer que vivía allí, le robaron “un televisor LCD de 32 pulgadas, una computadora portátil, un teléfono celular Nextel y otros dos celulares”.
Según el expediente, fue Gustavo Andrés Aponte, prófugo, quien “efectuó tres disparos hacia Quispe”, quien fue atendida en el Hospital General de Agudos Parmenio Piñero, donde consiguieron salvarle la vida pero no pudieron hacer lo propio con la niña que llevaba en su vientre.
El juez procesó a Héctor Ríos como “coautor” de los delitos de “robo agravado por su comisión con armas de fuego, homicidio criminis causa agravado por su comisión con un arma de fuego en grado de tentativa, aborto sin consentimiento de la mujer, tenencia de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal reiterada”, y embargó sus bienes hasta cubrir la suma de 400 mil pesos.
La causa continúa con la búsqueda de los cuatro prófugos.
Aquel episodio ocurrió poco antes de que otra joven, Melina Ríos, fuera asesinada en el barrio Papa Francisco, lo que precipitó el cumplimiento de la orden judicial de desalojo del predio.