El técnico informático que trabajaba para el titular de la Unidad Fiscal de Investigación del atentado a la AMIA no descartó ninguna de las hipótesis que se barajan sobre la muerte de Nisman. Negó haber mantenido una relación “íntima” con el fiscal y además aseguró desconocer por qué el arma que le facilitó no tenía sus huellas.
El técnico informático Diego Lagomarsino fue entrevistado por el diario El País de España y negó cualquier tipo de vínculo sentimental con el fallecido fiscal Alberto Nisman, más allá del laboral. “Si la Presidenta se refirió a una relación homosexual, confirmo que no. Lo que a mí me molesta de eso es que en el medio hay otras personas. Mis hijos son muy chiquitos, pero Alberto tiene una hija más grande”, sostuvo.
Por otra parte y consultado sobre le pistola calibre 22 que le facilitó al fiscal, Lagomarsino ratificó que Nisman se la pidió porque quería proteger a sus hijas y que no la limpió antes de entregársela. “Deberían estar mis huellas. Los motivos técnicos los desconozco”, respondió el técnico informático al diario español en el marco del reportaje que se llevó a cabo en el despacho de su abogado, Maximiliano Rusconi.
En relación a la denuncia contra la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, Lagomarsino contó que Nisman le había hablado sobre ese tema alrededor de seis o siete meses atrás. “Un día me muestra un expediente y dice: `Esta es la denuncia que estoy haciendo contra la Presidenta´”, a lo que el respondió: “¿Te vas a meter contra la Presidenta?”. Acto seguido, agregó que Nisman le dijo “¿Y vos también me vas a empezar a decir esas cosas? Estoy podrido de la gente que me dice que estoy loco”.
En otro de los puntos salientes del reportaje y ante la pregunta de si creía en la hipótesis del suicidio, suicidio inducido o asesinato, el técnico informático manifestó que ahora siempre piensa en las tres. “Todas se me mezclan. Cuando pienso en una, está la otra (…) En cuanto a las tres hipótesis… Suicidio, suicidio inducido o asesinato, a Alberto le cambiaba todo cuando hablaba de sus hijas. Entonces, si no pensó en ellas, ¿qué va a pensar en Diego? Después pienso en el asesinato. Y, la verdad, no sé qué fue. Pero el 18 de enero murió Nisman y murió el Diego Lagomarsino que yo era”, finalizó.