La Cámara Federal de Casación Penal anuló un fallo del Tribunal Oral en lo Criminal Diez (TOC10) que denegó la suspensión del juicio a prueba (“probation”) a un hombre acusado de “estafas reiteradas” que habrían comenzado a perpetrarse hace doce años.
La Sala Segunda de la máxima instancia del fuero penal del país, por mayoría, anuló la resolución del TOC10, lo apartó del expediente y dispuso que otro tribunal “deberá dictar un nuevo pronunciamiento de acuerdo a la doctrina aquí establecida”.
Los camaristas Alejandro Slokar y Angela Ledesma, con la disidencia de su colega Pedro David, afirmaron que “la ausencia de dictamen fiscal respecto de la viabilidad de la solicitud de la defensa importa un vicio que descalifica la resolución que denegó la suspensión del juicio a prueba y se impone su declaración de nulidad”.
Basaron su apreciación en que “nada impide la actuación del Ministerio Público Fiscal a pesar de la ausencia de requerimiento de elevación a juicio, toda vez que conserva la calidad de parte necesaria, en tanto debe procurar -entre otras funciones- las de velar por la observancia de la Constitución Nacional y las leyes y por el efectivo cumplimiento del debido proceso legal”.
El voto concurrente de la camarista Ledesma señaló que “no es posible concebir un proceso legal sin la participación y control del acusador público y que la querella no está facultada para la prosecución autónoma de delitos de acción pública ante la ausencia de estímulo fiscal”, mientras que David se basó en cuestionamientos procesales para oponerse.
La medida se dictó en el proceso en el que se investigan presuntas estafas cometidas por el imputado, que se habrían perpetrado entre los años 2003 y 2006.