El jefe de Gobierno porteño develó el misterio sobre su vicepresidente y de esta manera puso fin a la danza de apellidos que se fueron barajando en las últimas semanas, a un día de vencerse el plazo para la inscripción de los candidatos ante la Justicia electoral.
Finalmente y tras sonar los nombres de Marcos Peña, Esteban Bullrich y Rogelio Frigerio, el jefe de Gobierno porteño y precandidato presidencial, Mauricio Macri, logró convencer a Gabriela Michetti para que lo acompañe en la fórmula de cara a los próximos comicios.
Si bien la senadora nacional del PRO había desestimado hace unos meses el ofrecimiento de su jefe político para que lo acompañe en la carrera presidencial dado que su vocación era la de competir en la interna por la jefatura de Gobierno porteño (contienda que finalmente tuvo como victorioso a Horacio Rodríguez Larreta), ahora Macri logró revertir completamente la situación convenciéndola, quizás, con la necesidad de contar con su figura en la fórmula para recapitular el escenario que los vio victoriosos en la Ciudad en el año 2007.
Por otra parte, hay quienes afirmaban que tras conocerse que Zannini acompañará a Scioli en la elección, la inclusión de alguien de renombre y conocido para la ciudadanía resaltaría la fórmula de Macri por sobre la del actual gobernador bonaerense dado que el secretario Legal y Técnico de la presidencia es una persona que al margen de la importancia que significa para el kirchnerismo, no traccionaría demasiados votos como consecuencia de su bajo perfil en el Gobierno nacional.