La Legislatura de Córdoba le otorgó al gobernador peronista Juan Schiaretti la ratificación por ley del decreto que adjudica la licitación para la obra de los gasoductos troncales en el interior de la provincia, y el permiso para tomar deuda por unos 900 millones de dólares para financiar el emprendimiento.
Los gasoductos troncales fueron una de las principales promesas de campaña del peronismo cordobés. En la Cámara, recogió el apoyo del interbloque que forman la Unión Cívica Radical, el PRO y el Frente Cívico (juecismo). Sólo un juecista, Juan Pablo Quinteros, se negó a votar con el oficialismo.
También acompañó el bloque kirchnerista Córdoba Podemos, aunque con la disidencia de la única no “K” que integra la bancada, la ex juecista Liliana Montero.
Además, la Legislatura aprobó otra que permite tomar deuda por hasta 1.096 millones de dólares. De ese total, 596 millones deberán utilizarse para el rescate y reestructuración de los Boncor 2017 que se encuentran en circulación en el mercado. Los otros 500 millones de dólares podrán ser utilizados para financiar obras de infraestructura.
Hoy, como contrapartida del respaldo radical, el intendente Ramón Mestre tendría el voto de los concejales peronistas para que le habiliten un endeudamiento por hasta 150 millones de dólares.
Mestre necesita esos recursos para refinanciar deuda que vence en 2017 y para realizar obras públicas.