El Gobierno del socialista Miguel Lifschitz, en Santa Fe, envió a la Legislatura los pliegos de los candidatos a jefes y subjefes de la Policía provincial, Luis Bruschi y José Amaya, cumpliendo con una promesa realizada en la campaña.
Los legisladores de la oposición, en general, valoraron el gesto, aunque hubo críticas también por lo que se consideró una maniobra del gobernador para sacarse una responsabilidad de encima.
Los pliegos de Bruschi y de Amaya serán tratados por la Comisión de Acuerdo de la Asamblea Legislativa que preside el senador peronista Raúl Gramajo, y que integran otros tres senadores y ocho diputados.
Gramajo sostuvo que “desde el punto de vista constitucional no corresponde que nosotros le demos un dictamen porque no está dentro de las leyes o de la Constitución que esta comisión pueda darle acuerdo legislativo (al pliego del jefe de Policía de la provincia)”.
“Esta es la primera vez que me ocurre, a pesar de mis 15 años de presidente de esta comisión. De todas maneras, destaco la actitud del gobernador”, agregó.
Para Gramajo “de alguna manera Lifschitz deslinda sus responsabilidades” al pedir a otro poder que emita su opinión sobre el tema.
“No tenemos facultades constitucionales ni legales para dar un dictamen y menos aún un acuerdo legislativo porque no nos concierne por la Constitución ni por las leyes”, aclaró.