La idea de Enrico es otorgar facultades a los jueces y fiscales provinciales para intervenir en las causas de drogas, que por el momento solo le corresponden jurisdiccionalmente a la Justicia federal.
Con la “desfederalización”, que ya rige en otras provincias, como Buenos Aires o Córdoba, se apunta a resolver casos de narcotráfico de una escala geográfica menor. O sea, se pretende actuar sobre situaciones de narcotráfico que se generan en el distrito santafesino y no tienen trascendencia nacional.
Enrico sostuvo que “sabemos que combatir el narcotráfico es un trabajo constante, amplio y difícil por su diversidad de aristas, pero intentaremos profundizar en los controles de los precursores químicos, considerando que sin su desvío y regularizando su comercialización dentro del mercado lícito, no habría narcotráfico”.
“De mi parte, manifiesto que en Santa Fe necesitamos avanzar con el proyecto de ley de narcomenudeo, porque los magistrados provinciales tienen poco margen para intervenir y actuar en casos de drogas”, agregó
“Argentina no está ajena a las mafias que funcionan a partir de este flagelo destructor de la sociedad. Santa Fe y Entre Ríos son dos provincias afectadas por el narcotráfico, necesitan implementar un plan de abordaje urgente. El encuentro en la ciudad de Paraná, significa dar un primer paso en conjunto para asumir un compromiso colectivo, donde unamos fuerzas y operemos en pos de frenar el avance de este negocio oscuro de las drogas que atenta contra la integridad de las familias e instituciones”, concluyó.