El beneficio significaría una disminución de las cuotas superior al 10 por ciento, mediante la baja de la alícuota del 7,5 al 1,5 por ciento.
Medidas similares ya se tomaron en las provincias de Buenos Aires, Córdoba y en la Ciudad de Buenos Aires, para favorecer la toma de créditos hipotecarios.
La diputada socialista Clara García dijo al diario La Capital que se busca dar “un gran impulso a todos aquellos que hoy tienen un crédito hipotecario o los nuevos que se pidan porque va a impactar directamente en la disminución en la cuota”.
“Este proyecto tiene como finalidad garantizar el derecho al hábitat. Un derecho que en nuestro país todavía tiene una deuda importante y que desde los gobiernos se puede aportar a saldar. Ya sea con construcción directa de vivienda, mejoras en aquellos casos como los Fonavi que están muy deteriorados, con escrituras pero también con una política activa como en este caso que consiste en disminuir el costo del crédito hipotecario”, agregó.
García aseguró que “esto va a mejorar la posibilidad de acceder a créditos para vivienda única y también va a dinamizar la construcción, que es un gran dador de empleo”, y que con las operaciones de crédito de primera vivienda que vayan otorgando “se irá armando en los hechos una especie de censo respecto de cuántos se otorgan y eso permitirá ver a las claras cómo impacta la medida en el impulso que esperamos que inyecte a la operatoria”.