El proyecto tuvo 24 votos a favor y 22 en contra, y se discutió en medio de incidentes que ocurrían en las afueras del edificio, provocados por gremios y la oposición.
La Unión Cívica Radical consiguió el quórum y los votos para aprobar el proyecto.
Desde las primeras horas del día, militantes de algunas organizaciones se apostaron en las inmediaciones de la Legislatura, que estaba custodiada por la policía para asegurar que pudiera sesionar. Entonces, los militantes produjeron incidentes, al enfrentarse con los policías.
Entre las organizaciones que se oponen al nuevo Código de Faltas están la Fundación Puente Vincular, el SUTE, Asociación Vida Infantil, Comunidad Internacional de Mujeres viviendo con VIH Sida y VIHVO Positivo Mendoza, además de las tradicionales agrupaciones de izquierda.
Un apoyo clave fue el del diputado del Frente Renovador, Guillermo Pereyra, quien había manifestado en una entrevista con el diario mendocino Los Andes: «He pedido cambios sustanciales en el Código porque no puedo ir en contra de mis principios gremiales y peronistas y de eso dependerá que acompañe o no”. Al realizarse los cambios que propuso, terminó votando a favor.