“Si se tienen en cuenta las variables de precio, stock y reposición, visibilidad e identificación, observamos que el programa se cumple en apenas en el 57% de los locales analizados, mucho menos que el 80% que informó la Secretaría de Comercio Interior de la Nación», manifestó el Defensor del Pueblo bonaerense, Guido Lorenzino, al cumplirse dos meses desde la implementación del programa gubernamental.
El relevamiento se llevó adelante en hiper y supermercados de las ciudades en las que el organismo provincial tiene delegaciones, donde se verificó la presencia de los 64 productos de la canasta básica que mantendrán su precio congelado durante seis meses.
Los principales problemas detectados, según indicaron, tienen que ver con la inadecuada reposición de productos y la falta de stock. Además, se registró que en el 39,6% de los comercios relevados hay dificultades en la señalización de los productos, es decir, la identificación y visibilidad de la mercadería.
«Hay una falta de control por parte del Gobierno nacional para que los empresarios cumplan con este acuerdo. En un escenario de crisis, donde se busca incentivar el consumo de los sectores más vulnerables, estamos ante una medida electoralista que le da la espalda a la realidad», agregó Lorenzino.
Desde la entrada en vigencia del programa, la Defensoría del Pueblo bonaerense realizó, a través de su Área de Consumidores y de las delegaciones, más de 250 relevamientos en Almirante Brown, Balcarce, Bahía Blanca, Berazategui, Bolívar, Chacabuco, Coronel Suárez, Ituzaingó, La Plata, Lincoln, Lomas de Zamora, Mar Chiquita, Mar del Plata, Mercedes, Miramar, Olavarría, Pergamino, Pigûe, Roque Pérez, Saladillo, San Nicolás, San Pedro, Tandil y Tigre.