El primer candidato a diputado nacional por el Frente de Todos, Sergio Massa, visitó la ciudad bonaerense de Chacabuco, donde recorrió una fábrica de pastas y dialogó con los vecinos en la Asociación de Jubilados y Pensionados acompañado por el candidato a jefe comunal local, Ricardo Ciminelli.
En ese marco, sostuvo que el Presidente Macri se está yendo y que en su gira de despedida -en alusión a la marcha del “Sí se puede»- recordó que Argentina tiene clase media y hace anuncios disparatados que no puede sostener porque ya le mintió a los argentinos.
“El 11 de diciembre empieza un nuevo Gobierno con cambios en las políticas públicas. Se viene una reforma en el sistema impositivo para fortalecer a las pymes, los comercios y al sector productivo, porque creemos en la Argentina de la producción y del trabajo como motores para el crecimiento y para salir de la pobreza”, aseguró.
Por otra parte, el líder del Frente Renovador recordó que desde el año 2016 los jubilados han sufrido una sistemática pérdida en su poder de compra porque la actual administración, con una mirada “cruel”, “fría” e “insensible”, intentó cerrar las cuentas públicas recortando jubilaciones en un 19,5%, con el agravante -agregó- de que hoy el PAMI separa en jubilados de primera y de segunda porque les quita el derecho a los remedios a los que tienen casa y auto, como si fuera un privilegio, cuando en realidad es fruto del trabajo de toda su vida.
“Estoy seguro de que los jubilados van a apoyar a Alberto Presidente y a Axel gobernador, porque saben que es la única manera para recuperar todo lo que perdieron con Macri”, auguró.
En otro orden y tras ser consultado sobre su opinión acerca del primer debate presidencial que se realizó el domingo pasado, Massa dijo que vio a Alberto Fernández claro, seguro y convencido de hacia dónde va la Argentina, mientras que por el lado de Macri observó la desnudez de un Presidente al que se le corrió el velo y se le vieron todas las mentiras desde el 2015 hasta la actualidad. “Cuando Macri asumió su Gobierno, la deuda de la Argentina contra el PBI era del 20%. Hoy, debemos casi el 100% y lo peor es que esa deuda no la vemos ni en rutas, hospitales, escuelas o fábricas”, graficó.
Por último vaticinó para la Argentina el fin de la grieta y de la confrontación permanente y el comienzo de una nueva etapa. “A aquellos que en agosto eligieron por otras fuerzas políticas o que tenían la incertidumbre de cómo iba a ser la convivencia dentro del Frente de Todos, les digo que vengan sin miedo. Aprendimos de nuestros errores y volvemos al Gobierno para ser mejores”, concluyó.