Se trata de Raúl Roberto Aceituno, a quien la Cámara Federal de Casación Penal le confirmó la prórroga por seis meses de la prisión preventiva, bajo la jurisdicción del tribunal oral de Bahía Blanca.
Aceituno está acusado por el crimen del dirigente estudiantil de la Universidad Nacional del Sur (UNS), David Hover “Watu” Cilleruelo.
Su procesamiento fue ordenado por el juez Alejo Ramos Padilla, cuando fue subrogante del juzgado federal de Bahía Blanca y desempolvó varios expedientes por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura que estaban cajoneados, en algunos casos desde hacía años.
La Triple A fue definida por el magistrado como “una asociación ilícita para cometer crímenes de lesa humanidad entre 1974 y 1975”.
Junto con Aceituno fueron procesados Juan Carlos Curzio, Osvaldo Omar Pallero, Héctor Ángel Forcelli y Héctor Oscar Chisu.
Aceituno sufre, además, un embargo por cinco millones de pesos.
El represor integraba la “seguridad” del ex rector de la Universidad Nacional del Sur Remus Tetu, también investigado por “marcar” a estudiantes que luego sufrieron las consecuencias de la represión.