La iniciativa presentada en el Congreso por la diputada nacional Josefina Mendoza (UCR), y que cuenta con el acompañamiento de un grupo de legisladores de Juntos por el Cambios, tiene por objeto la creación de una “Línea Telefónica de Apoyo Psicoemocional” para generar una herramienta de contención a aquellas personas que lo necesiten y soliciten de manera gratuita, las 24 horas del día, dadas las circunstancias actuales del aislamiento social, preventivo y obligatorio devenido por la pandemia de COVID-19.
“El pico de la pandemia, la posible extensión y restricción, aún más, de la cuarentena, generan situaciones de incertidumbre y angustia en muchas personas. Generar herramientas de contención tal como sucede en otros países (Uruguay por ejemplo), es necesario”, expresó Mendoza a través de su cuenta de Twitter.
Según se especificó entre los artículos de la iniciativa, la atención de la línea telefónica será brindada por psicólogos profesionales y matriculados, y entre sus principales funciones tendrá que desarrollar una atención especializada en las áreas de niñez, adolescencia y adultos mayores; generar un plan de asistencia, recomendaciones, seguimiento y monitoreo de la situación de cada usuario; y recomendar derivaciones a otros especialistas médicos en caso de ser necesario.
Asimismo, también se sistematizarán los datos que surjan de las llamadas realizadas para la elaboración de indicadores, garantizando el secreto profesional y la confidencialidad de la información personal; y se realizarán derivaciones a las autoridades competentes, en caso de presumir peligro a la vida o la integridad de las personas.
El proyecto, además, establece que los psicólogos especialistas deberán ser contratados bajo la modalidad contractual prevista en los Artículos 99° y 100° del Capítulo IV “Del contrato de trabajo eventual” de la Ley de Régimen de Contrato de Trabajo N° 20.744; y por el artículo 69° del Título “Contrato de trabajo eventual” de la Ley de Empleo Nº 24.013.
Por otra parte se determinó que el plazo de vigencia de la ley, en el caso de resultar aprobada, rija hasta que finalice la “Emergencia Sanitaria”, en el marco del Decreto de Necesidad y Urgencia Nº 260/20 en todo el territorio nacional.