La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó que las cantidades vendidas por los comercios minoristas cayeron 17,8% en agosto frente a igual mes de 2019, -medidas en cantidades-, acumulando de esta manera en lo que va del año una caída anual de 30,5% que se explica por las fuertes bajas registradas en marzo, abril, mayo, junio y julio.
“Si bien muchas ciudades del interior normalizaron su actividad, el cumplimiento de los protocolos, los menores ingresos de las familias, los altos niveles de endeudamiento y la menor circulación de gente en las calles siguen afectando el consumo. Más difícil es la situación en la región del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde el aislamiento social, preventivo y obligatorio es más estricto”, analizaron desde la entidad que conduce Gerardo Díaz Beltrán.
En efecto, el informe remarcó que la mayor retracción se sintió en el AMBA, donde las ventas minoristas cayeron 33% porque las restricciones y controles son más severas (en el resto del país, en cambio, las ventas minoristas bajaron 9,4%). “En mayor o menor medida todos los rubros finalizaron en baja, incluso aquellos considerados esenciales como ´alimentos´, ´farmacias´ o ´materiales eléctricos y ferreterías´”, observaron.
El rubro con menor caída interanual en el mes, por su parte, fue nuevamente “Farmacias” (-4,9%), siempre medidas en cantidades, dado que las ventas en ese sector se mantuvieron activas incluso en lo peor de la cuarentena.
El segundo rubro con menor descenso anual en agosto, en tanto, fue para “Alimentos y bebidas” (-6,7%). “A medida que la gente comenzó a circular por las calles, el consumo de esos productos dejó de concentrarse en los grandes supermercados. A su vez, se redujo la compra online y se incrementó la realizada en locales al público”, señalaron desde CAME.
En el otro extremo, el rubro de mayor desplome anual fue “Relojería, joyerías y bijouterie” con una baja de 38,1%. Como dato adicional, vale mencionar que las ventas en esos comercios hace tiempo que se mantienen con caídas muy profundas y que además incide la venta ilegal callejera de esos productos, que a pesar de la cuarentena no se retiró de las calles.
“Indumentaria” fue el segundo rubro de mayor caída anual en el mes (-32%). En este cado, influye la falta de poder adquisitivo de las familias, así como también las menores necesidades de esos productos debido a las estadías largas en el hogar y el cumplimiento de los protocolos que limita la cantidad de gente que puede entrar al mismo tiempo al local (en algunos negocios se llegaron a realizar largas colas para ingresar).
De la misma manera, en “Calzado y marroquinería” se registró una retracción promedio de 28,5% anual, con la particularidad de que si bien se desaceleró la tasa de caída, continúa siendo significativa.
Por último, en “Mueblerías, decoración y textiles para el hogar”, las ventas cayeron 23,8% anual en el promedio país. “Hubo más consumo de productos nacionales debido a las menores importaciones en ese rubro, y al mismo tiempo los comercios a cielo abierto volvieron a captar ventas que se estaban concentrando en grandes supermercados”, se destacó en el informe.
Vale mencionar que la medición de CAME se realizó en base a 1.100 comercios de todo el país, relevados entre el lunes 31 de agosto y el sábado 5 de septiembre de 2020 por un equipo de 30 encuestadores localizados en las capitales del país, GBA y CABA.