En medio del escándalo desatado a partir de las versiones que hablaban de una suerte de “vacunatorio vip” luego de que el periodista Horacio Verbitsky relatara en una conversación radial que se había contactado con Ginés González García para saber cómo acceder a la vacuna Sputnik V, y que éste luego le indicara -a través de un secretario- que se aproximara al propio Ministerio de Salud para que se le aplique, el Presidente Alberto Fernández -furioso con esta cuestión, transcendió- le pidió la renuncia al funcionario.
Asimismo y paralelo a lo sucedido con Verbitsky, comenzaron luego a multiplicarse las versiones de que el periodista no habría sido el único “privilegiado”, sino que además dirigentes políticos y sindicales, así como también familiares de los mismos, habrían recibido trato preferencial por parte de la cartera de Salud nacional, evitando de esta manera no sólo la inscripción para recibir la misma, sino que algunos, ni siquiera, formaban parte de los grupos de riesgo.
Ahora y ante la salida del González García, cuya gestión ya venía siendo observada desde cerca por la Casa Rosada a partir de los pasos en falso dados por el funcionario en relación a sus pronósticos durante la pandemia, así como también por la negociación de los contratos para la adquisición de vacunas, por mencionar algunos de ellos, la principal candidata para asumir el cargo -al menos de momento y hasta tanto se piense más detenidamente en otra persona- es la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti.