De acuerdo a lo argumentado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), el objetivo de la nueva normativa es darles mayor transmisibilidad a las Facturas de Crédito Electrónicas (FCE), ya que en la actualidad sólo circula el 1% de las mismas.
En la primera etapa, que entrará en funcionamiento a partir del 1º de abril, las FCE se podrán descontar o transmitir a otros sujetos autorizados, como las entidades financieras o proveedores no financieros de crédito; o bien remitir desde el Sistema de Circulación Abierta para su negociación en los mercados de valores.
Estas operaciones, señalaron desde la autoridad monetaria por medio de un comunicado, se podrán realizar a través de una nueva pestaña que tendrán habilitadas las MiPyMEs en su Home Banking. Las transmisiones, por su parte, serán gratuitas y las entidades financieras no podrán cobrar comisiones -en etapas posteriores se incorporarán nuevas funcionalidades tales como cesión electrónica y aval, entre otras-.
“El Sistema de Circulación Abierta equipara a las Facturas Electrónica de Crédito a la operatoria y funcionalidad del Cheque Electrónico (ECHEQ), y permitirá que las MiPyMEs puedan acceder a una mayor cantidad de fuentes de financiamiento anticipado con mejor certeza de cobro, ya que al vencimiento las FCE serán cobradas mediante compensación interbancaria y su falta de pago se verá reflejada en la Central de Deudores del Banco Central”, especificaron.
Por último, otra de las facilidades que brindará esta normativa es la emisión de un comprobante a requerimiento del interesado, que permitirá iniciar acciones judiciales ante el no pago a término de las FCE MiPyMEs.
La medida, aprobada por el Directorio de la entidad, forma parte del trabajo conjunto y coordinado entre el BCRA, la AFIP y la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa y los Emprendedores del Ministerio de Desarrollo Productivo; y contó con el aval de la Comisión Nacional de Valores.