La Argentina votó a favor de la resolución que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU acaba de aprobar en Ginebra respecto a “la situación de los derechos humanos en Ucrania a partir de la agresión rusa”, decisión que fue sancionada con 32 votos a favor, 13 en abstención y 2 en contra.
De esta manera, la Presidencia de Derechos Humanos que es ejercida por Argentina deberá designar una comisión internacional independiente, integrada por tres expertos para investigar las violaciones a los derechos humanos en Ucrania.
Por su parte, la directora de Derechos Humanos de la Cancillería Argentina, Cecilia Meirovich, dijo durante su intervención que “seguimos con preocupación y lamentamos profundamente la situación que se está viviendo en Ucrania”, a la vez que recordó que tal como lo expresara el Canciller Santiago Cafiero el lunes pasado en el marco de su participación en el Segmento de Alto Nivel, “el mundo no soporta más sufrimiento ni debe tolerar más muertos. La Paz es urgente. El diálogo debe comenzar ya”.
De la misma manera, la funcionaria agregó que tal como lo señalara la Alta Comisionada en la apertura de sesiones del Consejo, la situación generada en Ucrania está poniendo en riesgo innumerables vidas, a la vez que afirmó que coinciden con ella en que el derecho a la vida es el bien máximo a proteger.
“De una cosa estamos seguros: no existe una solución militar en este asunto. La historia nos ha demostrado una y otra vez que la violencia no es el camino y que no es sino a través del diálogo y la diplomacia que se alcanzan soluciones duraderas. Es por eso que, tal como lo manifestamos en la sesión de emergencia de la Asamblea General el martes, reiteramos a la Federación Rusa que cese inmediatamente en el uso de la fuerza, y condenamos la invasión a Ucrania así como las operaciones militares en su territorio”, completó Meirovich, quien además enfatizó el “firme compromiso” de la Argentina con el principio de la solución pacífica de las controversias y la necesidad de que todos los países, sin excepción, cumplan con los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, así como también que respeten la soberanía de los Estados y su integridad territorial.