Luego de una maratónica sesión, la Cámara de Senadores de la Nación aprobó los proyectos de presupuesto universitario y de Boleta Única de Papel (BUP), aunque rechazó uno que era clave para el Gobierno y que se había sumado al temario a último momento, que era el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) por el que se le asignaban 100 mil millones de pesos a la SIDE en concepto de fondos reservados.

La primera de las normas aprobadas por 56 votos afirmativos, 11 negativos y 1 abstención (Financiamiento Universitario), ya contaba con el visto bueno por parte de Diputados, con lo cual quedó sancionada de manera definitiva. No obstante, desde la Casa Rosada ya habían advertido -tal como lo hicieran en su momento con la movilidad jubilatoria-, que toda aquella medida que alterara el “equilibrio fiscal” sería derogada, con lo cual todo parecería apuntar que así terminará siendo.

Por otro lado, la Cámara Alta también le dio su aprobación (39 votos a favor y 30 en contra), con modificaciones, al proyecto de Boleta Única de Papel, el cual ahora deberá retornar a Diputados para definir si las acepta o rechaza. En este caso, la idea del oficialismo es trabajar para que la iniciativa resulte finalmente aprobada y poder llevarla a la práctica en las elecciones del próximo año.

Finalmente y contrario a los deseos de Balcarce 50, el cuerpo legislativo se pronunció en contra del decreto que aumentaba los fondos reservados para la SIDE: fue por 49 negativos, 11 afirmativos y 2 abstenciones, quedando de esta manera desestimado por parte del Parlamento ya que en Diputados se habían pronunciado en igual sentido a fines de agosto pasado.

El resultado adverso para la administración nacional, cabe señalar, no hubiera sido posible sin el acompañamiento del radicalismo, quien además de apoyar al pedido de la oposición para que el tema fuera tratado en el recinto, también levantó sus manos al momento de expresar el rechazo al DNU 656.

Desde la Oficina del Presidente, en tanto, descargaron su furia por lo acontecido tras expresar su condena al “voto irresponsable de un grupo de legsisladores que dejaron al Sistema de Inteligencia argentino sin recursos en un momento histórico del país”.

“El kirchnerismo y el radicalismo, que deberá decidir si es parte de la transformación de la Argentina o es parte de lo peor del pasado, rechazaron una ampliación de fondos que simplemente buscaba llevar el presupuesto de la Secretaría de Inteligencia (SIDE) al nivel promedio histórico, y que tenía por objetivo garantizar su normal funcionamiento”, apuntaron desde la comunicación oficial del primer mandatario por medio de un comunicado.

Por tanto, advirtieron que los responsables del desfinanciamiento del Sistema de Inteligencia deberán hacerse cargo de cualquier hecho que ocurra hasta que la SIDE está correctamente financiada y pueda recuperar sus capacidades vitales.