La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, lanzo el programa “Manos a la Obra” desde el Complejo Penitenciario de Ezeiza, el cual implementará el Servicio Penitenciario Federal (SPF) en todo el país con el objetivo de que todos los presos trabajen en las cárceles.
“Nosotros conocemos bien nuestra Constitución. Las cárceles tienen que ser sanas y limpias, no para castigos sino para la reinserción. Y el Código Penal de la Nación dice que las personas privadas de su libertad deben hacerse cargo de mantener las instalaciones penitenciarias y de pagar con su trabajo aquello por lo que hoy están detenidas”, explicó la funcionaria en relación a la medida.
Asimismo, remarcó que si un juez les llegara a decir que le tienen que pagar por no trabajar, entonces van a llegar hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación, dado que -consideró- se trataría de una injusticia para la sociedad. “Nosotros queremos reinserción, pero no en base a la comodidad de aquella persona que afuera prefería robar en vez de trabajar y que aquí quiere llevarse un sueldo sin trabajar. Eso no va, se terminó”, enfatizó.
Por otro lado, Bullrich anticipó que presentarán un proyecto para poder llevar adelante un cambio sustancial en la ley de ejecución de la pena privativa de la libertad, entre otros cambios de fondo, que en definitva reglamente que el trabajo es trabajo y al que no trabaje no se le va a pagar un salario.
“Manos a la obra es ocio cero. El ocio además no es un tratamiento penitenciario. Es entrar en la cultura tumbera y no lo vamos a permitir; esa es la cultura de la destrucción social. A partir de ahora, todos los presos van a trabajar”, completó.