La Justicia falló una vez más a favor de un ex funcionario nacional que había sido apuntado en numerosas oportunidades por el diario comandado por Saguier en un presunto caso de coimas que nunca existió.

El tradicional matutino porteño sufrió una nueva negativa por parte de la Justicia luego de que desestimaran un “recurso extraordinario” que presentaron contra el fallo que le sugiere publicar en sus páginas las conclusiones de la sentencia a favor del ex subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Economía, Carlos Bercún, quien fue blanco de una serie de artículos periodísticos donde lo involucraron en un caso de supuestas coimas en el Senado del cual la Justicia penal determinó que ni siquiera existieron (ver: Caso Bercún-La Nación: fallo recomienda al matutino publicar la inexistencia del hecho denunciado).

“El recurso extraordinario constituye una vía excepcional, limitada a la revisión de lo decidido en materia federal, quedando excluídas las cuestiones basadas en puntos de hecho o de derecho común o procesal”, comienza el fallo de la Sala L de la Cámara Civil sobre la causa BERCUN CARLOS Y OTROS c/ S.A. LA NACION Y OTROS s/DAÑOS Y PERJUICIOS.

Además, añade: “Para que exista relación directa o inmediata con las normas constitucionales -requisito inexcusable- se debe tratar en principio de la interpretación de algún modo, de leyes de carácter federal y cuando son normas de derecho común o procesal las cuestionadas -como en el caso de autos- la relación directa o inmediata que requiere el art. 15 de la ley 48, que expresamente excluye la interpretación o aplicación que los tribunales formulen de las normas de carácter procesal o común, debe hacérselo sólo si la resolución es arbitraria o puede acarrear gravedad institucional, cuestiones que no se presentan en el caso en estudio…”, continúa explicando la decisión judicial en relación al recurso presentado por La Nación.

Por lo tanto y ya prácticamente agotadas las instancias jurídicas para seguir recurriendo a los tribunales, no se explica cómo un centenario periódico de circulación nacional continúa resistiéndose -por llamarlo de alguna manera- a publicar algo tan simple y ejemplificador: la verdad.