Un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) arrojó que las cantidades vendidas por los comercios minoristas cayeron 2,3 por ciento durante mayo, en comparación al mismo mes del año pasado, acumulando de esta manera una baja anual de 3,4 por ciento para los primeros cinco meses del 2017.

Asimismo observaron que si se comparan esos porcentajes con los de abril, las ventas crecieron un 6,3 por ciento, lo cual pese a tratarse de un comportamiento que obedece a una cuestión estacional, no deja de ser positivo.

Por otra parte y mientras que el consumo en los locales al público continuó bastante retraído, las ventas online repuntaron en casi todos los rubros (especialmente se vio en juguetes, electrodomésticos e indumentaria). No obstante, aclararon que incidió sobre esa estadística la jornada denominada “Hot Sale”, que se trató de días de descuentos “agresivos” que contaron en esta última oportunidad con más cantidad de participantes.

Justamente en el canal online y según indicó el informe, las ventas de las pymes crecieron 3,1 por ciento anual; por lo que si se toman ambos resultados (locales fijos y online), la caída fue del 1,8 por ciento anual en el mes.

“Se observó una recuperación de la venta online, que viene creciendo desde hace tiempo como parte de los nuevos hábitos de consumo de la población”, expresó el titular de CAME, Fabián Tarrío, sobre el comportamiento de los consumidores.

El estudio, además, aclaró que las compras fueron muy dispares entre ciudades y negocios del mismo rubro, como viene sucediendo desde hace dos meses, mientras que la buena noticia del mes fue que repuntó la venta anual en locales a la calle en tres provincias: Córdoba (0,5%), Santiago del Estero (1,5%) y Chubut (1%). No obstante, continuó el declive fuerte en las provincias de frontera como Misiones (-6,9%), Formosa (-6,1%), Mendoza (-4,0%) o Santa Cruz (-5,2%), afectadas por el cruce de los argentinos a Paraguay y Chile, principalmente.

“El principal medio de pago fue la tarjeta de crédito, donde ya rigen los descuentos en los aranceles que cobran los bancos a los comercios por el uso del plástico. Los negocios que ofrecieron cuotas sin interés tuvieron más clientes que aquellos que lanzaron descuentos en efectivo o no habilitaron financiamiento, ya que la gente sobre la tercera semana del mes se quedó con poco resto de dinero”, observaron desde CAME.