“Esto significa que quienes inician un trámite sucesorio o hacen una donación, tengan un gravamen menos”, dijo la ministra de Gobierno y Justicia, Rosario Romero.
Romero recordó que este impuesto “fue muy discutido y resistido por ciertos sectores, porque significó para quienes inician un sucesorio o hacen una donación, una carga más”. “Se propicia la supresión del impuesto a la herencia, y pensamos que la Legislatura le dará pronto tratamiento porque hay una coincidencia entre los bloques de las Cámaras”, explicó la ministra.
“El gobernador ha entendido -continuó-, en la búsqueda de aliviar los bolsillos de los contribuyentes y atendiendo a pedidos expresos del Colegio de Abogados, de Escribanos, del Consejo de Ciencias Económicas y de mucha gente que tiene trámites sucesorios, que era bueno derogar este impuesto. Creo que es una buena noticia”.
Respecto a si esta supresión tendrá un impacto negativo en las arcas de la provincia, Romero informó que “la incidencia es del 0,36 por ciento”, pero lo que genera es “la obligación por parte de los contribuyentes, aún para lograr la excepción, de hacer una gran cantidad de trámites administrativos ante ATER, que con esta derogación no serían necesarios”.
“Implicaba tiempo y recursos de la administración. Con esta propuesta se ha pensado en la manera de aliviar el bolsillo de los contribuyentes”, concluyó.