El hecho ocurrió el 4 de agosto en la estación Flores del Ferrocarril Sarmiento, cuando el policía, durante un control de rutina, advirtió que el pasajero tenía más de 140 mil pesos que había cobrado momentos antes como indemnización.
El efectivo tomó un fajo de 20 mil pesos y le dijo “esto es mío, tomátelas de acá”. Pero el pasajero llamó al 911 y consiguió que el uniformado fuera detenido y le devolvieran su dinero.
Los jueces destacaron que “el denunciante a la brevedad solicitó ayuda a su pareja para identificar al agresor, comunicó lo ocurrido al Servicio de Emergencias y acató sus instrucciones: regresó al lugar y colaboró con el personal policial que lo asistió señalando, en modo contundente”, al acusado como responsable. “Este accionar, indefectiblemente, demuestra preocupación genuina en anoticiar lo sucedido y recuperar su dinero”.
Con la indemnización, la víctima planificaba comprar un terreno para comenzar a edificar su casa.