Los kirchneristas Alejandro Marinao, Javier Iud y Ariel Rivero ya habían impulsado esta iniciativa, sin éxito, en 2016, y ahora volvieron a la carga.
El proyecto de ley trata que sea obligatoria la realización de estudios médicos y bioquímicos anuales y la obtención de un “Certificado Psico-Físico” para los funcionarios del Poder Ejecutivo hasta la categoría de director y de miembros de la Policía de Río Negro hasta el rango de subcomisario.
Además, incluye a los funcionarios del Poder Legislativo hasta la categoría de director y legisladores provinciales, con el propósito de desestimar la adicción a drogas ilegales.
Los estudios deberían realizarse una vez al año, e incluirán exámenes psiquiátricos, rinoscopia, orina y sangre completos.
Los autores del proyecto señalan en los fundamentos que “el uso de estupefacientes en la administración pública es un tema que debería preocuparnos, especialmente a quienes ocupamos cargos de elección popular. Por eso creemos importante cumplimentar estos exámenes”.
“Entendemos a las adicciones como enfermedades y por lo tanto no pretendemos estigmatizar a quienes las padecen, sino por el contrario, procuramos que las personas puedan tratarse y recuperarse”, expresaron.