En las grandes concentraciones urbanas también puede estudiarse la aplicación de un sistema que combine circunstancias temporales y espaciales, es decir, horarios y territorios. Por ejemplo, actividad comercial “X” por la mañana en la zona norte y por la tarde en la zona sur. O distribución por día de la semana, etc.
DEBEMOS EFICIENTIZAR EL TRANSPORTE PÚBLICO, YA QUE ES IMPOSIBLE REEMPLAZARLO POR EL DESPLAZAMIENTO PRIVADO EN LAS GRANDES CONCENTRACIONES URBANAS.
EL TREN, EL SUBTERRÁNEO Y LOS COLECTIVOS que prestan el servicio público del TRANSPORTE son, en ese orden, los medios de desplazamientos terrestres con menor tasa de morbi-mortalidad y siniestralidad vial grave (*).
Es evidente que si desfavorecemos o reemplazamos en las grandes urbes estos medios por vehículos privados como automóviles y motos (excluimos las bicicletas por razones obvias) vamos a estar “trocando” víctimas de una pandemia natural (COVID-19) por las de una pandemia no natural, como lo es la vial. AÚN HOY, CON CONFINAMIENTO Y CIRCULACIÓN RESTRINGIDA, HAY MÁS VÍCTIMAS VIALES QUE LAS PRODUCIDAS POR EL CORONAVIRUS.
Por ello, el desafío es encontrar soluciones a los problemas que hoy nos presenta la dificultad del “aislamiento” en el medio de transporte público Y NO MENOSCABAR SU USO.
*Director ISEV
(*) Ferrocarril y Subterráneo no superan el 1% de la siniestralidad vial grave y el transporte público automotor regular no supera el 3%. Los automotores sedan y utilitarios alcanzan el 50% de participación en la siniestralidad vial grave y las motos superan el 32%.