Un informe elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) arrojó que durante enero de 2023 los precios de los agroalimentos se incrementaron 3,5 veces desde el campo (origen) a la góndola (destino), lo cual representa un leve incremento respecto de la brecha de 3,4 veces de diciembre 2022.
En promedio, la participación del productor explicó el 28,2% de los precios de venta final, siendo que los productores de frutilla tuvieron la mayor participación (51,6%), mientras que la menor fue para los de manzana roja (9,9%).
Respecto a la brecha en los productos frutihortícolas y en los ganaderos, en el primero de ellos los precios de las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta IPOD -del campo a la góndola- se multiplicaron por 4,9 veces en enero, por lo que el consumidor pagó $4,9 por cada $1 que recibió el productor frutihortícola, mientras que en el ganadero por los cinco productos y subproductos ganaderos que componen la canasta IPOD, el consumidor abonó tres veces más de lo que recibió el productor.
En relación a las mayores y menores brechas IPOD de enero, se indicó que la manzana roja (10,1 veces), la zanahoria (10), el zapallito (9,1), la pera (7) y la mandarina (6,4 veces), fueron los cinco productos que presentaron mayor diferencia entre los precios de origen y destino.
Por el contrario, entre los productos que presentaron menor diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor se encuentran dos de origen animal y tres frutihortícolas: en el caso de la frutilla (1,9 veces), producto con la brecha más baja del mes, los precios aumentaron un 42,4% al productor y un 12,5% al consumidor, mientras que los precios de la acelga y del repollo (2,5 veces) registraron un aumento en origen de 52% y 96%, respectivamente, y en destino se incrementaron 21% en el primer caso y 8% en el segundo.
Con respecto a la baja brecha campo-góndola de los productos y los subproductos ganaderos, los huevos y el pollo (2,2 veces), por lo general tienen sistemas de producción integrados, lo que significa que todos los actores de sus respectivas cadenas de valor son parte del riesgo del negocio.
“La caída del poder adquisitivo de los consumidores también ha limitado mantener y/o elevar los precios de góndola de varios de los productos que conforman la canasta IPOD. Asimismo, otro de los factores que influyó en la conformación de precios de los productos agropecuarios fue el aumento de los costos logísticos: durante 2022, insumos básicos como el gasoil y los neumáticos presentaron incrementos del 121% y 124%, respectivamente, subas que superaron a la inflación”, analizó CAME en el trabajo difundido.