El gobernador bonaerense se pondrá al frente de los dos temas que más preocupan a su administración, en busca de dar señales a la Casa Rosada.

En su regreso al país de sus vacaciones en Europa, el gobernador Daniel Scioli retomará la actividad con una reunión del gabinete económico que tiene como puntos principales de la agenda los dos temas que generan más preocupación en su administración: la negociación salarial abierta con los gremios docentes y estatales y el reclamo en torno a los recursos coparticipables que recibe de Nación.

El mandatario provincial arribó al país, según se informó oficialmente, y al mediodía encabezó en la sede porteña del Banco Provincia una reunión del gabinete económico que, formalmente, fue convocada para evaluar la marcha de la paritaria docente.

Del encuentro participarán el jefe de Gabinete, Alberto Pérez, los ministros de Economía, Silvina Batakis, de Trabajo, Oscar Cuartango, de Infraestructura, Alejandro Arlía, la titular de Educación, Nora De Lucía, y su par de Arba, Martín Di Bella.

Tras el comienzo de las paritarias, el 14 de enero, autoridades provinciales y gremios decidieron postergar las discusiones sobre los números finos de los incrementos salariales previstos para este año y aplazarla hasta el 8 de febrero con el objeto de esperar una resolución de la pauta nacional.

El Frente Gremial Docente pidió un 30,3 por ciento de aumento, antes de que la Nación decidiera actualizar el Mínimo no Imponible del Impuesto a las Ganancias.

La paritaria docente bonaerense genera expectativa porque el gobierno de Scioli espera asistencia nacional para cumplir con la nueva escala salarial, en medio del reclamo provincial por la rediscusión del régimen de Coparticipación Federal de Impuestos.

En los últimos días, varios funcionarios del gobierno sciolista salieron a advertir la necesidad de contar con mayores fondos de Nación para hacer frente a los acuerdos salariales que se negocian en la mesa de paritarias.

En ese marco, el ministro de Infraestructura bonaerense, Alejandro Arlía, advirtió que “para afrontar la paritaria la provincia necesita más recursos que los que tiene” y volvió a reclamar a la Nación el descongelamiento del Fondo del Conurbano y que se rediscuta el sistema de Coparticipación.

“Para afrontar una paritaria de las cifras que se están manejando, la provincia necesita más recursos que los que tiene”, sostuvo Arlía, aunque precisó que “la actualización salarial está fuera de discusión”.

El funcionario sciolista dijo que los estatales deben estar tranquilos porque “se está trabajando con la suficiente antelación”, aunque advirtió: “Queremos tener previsibilidad porque no queremos dar un aumento que después no podamos pagar”.

También el titular de Arba, Martín Di Bella, llamó la atención en este sentido, al señalar que con el incremento en la recaudación que se viene registrando en la Provincia, “no alcanza” para afrontar los fondos que requeriría un incremento salarial como el que piden los gremios.

En la misma línea, el titular del Banco Provincia, Gustavo Marangoni, señaló que la Provincia paga “550 mil salarios por mes y cada 1 por ciento de aumento salarial de sus empleados representa 650 millones de pesos”, el equivalente a lo que cobra la provincia hoy por el Fondo del Conurbano, congelado desde mediados del los ‘90.

“Un aumento salarial del 20 por ciento para los trabajadores provinciales es igual a 20 Fondos del Conurbano”, ejemplificó Marangoni.

En efecto, el cálculo sobre el nivel de incidencia que tendrán las subas salariales en el presupuesto provincial indica que una mejora mínima del 20 por ciento implicaría un incremento anual en la partida de remuneraciones contenida en el Presupuesto de 12.600 millones de pesos.