Entre los aspectos del “megaproyecto” enviado por la Casa Rosada al Parlamento, sobresale la aplicación de un recargo del 30% para las compras que se realicen en el exterior. Sin embargo, no sólo el turismo será el único afectado, ya que también lo propio podría suceder con los servicios o suscripciones que se ofrecen en moneda extranjera dentro del país.