El ministro de Gobierno de Santa Fe, Roberto Sukerman, negó en la Legislatura que en su provincia existan “vacunatorios vip”, y consideró que si se registró algún tipo de anomalía se trató de “casos aislados”.
La polémica por un “vacunatorio VIP” explotó en la provincia de Santa Fe, donde el jefe interino del Departamento Enfermería del Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria denunció que, entre enero y marzo, funcionó un sistema de privilegios adonde acudieron sindicalistas, dirigentes, funcionarios y hasta familiares directos del propio director del nosocomio.
En Córdoba, el legislador radical Marcelo Cossar volvió a insistir con la denuncia de que en Córdoba también existen “vacunados VIP”, y recordó que el oficialismo se negó a hacer público el listado de las personas que recibieron las dosis contra el COVID-19.
El ministro de Desarrollo Productivo, Juan Luis Fernández, asumirá la banca en la Legislatura provincial de Tucumán en reemplazo de Sandra Tirado, quien renunció para hacerse cargo del viceministerio de Salud de la Nación.
La decisión de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas fue tomada luego de que en varios medios de comunicación se difundieran los apellidos de las personas que habrían sido vacunadas contra el coronavirus en la cartera de Salud nacional, apartándose de esta manera de los lineamientos técnicos correspondientes para estas situaciones.
El Presidente instruyó al jefe de Gabinete a que le pida la renuncia al ministro de Salud luego de que el periodista Horacio Verbitsky contara que el funcionario le había facilitado el acceso a la vacuna contra el COVID-19. Trascendió, además, que otros dirigentes también habrían recibido “trato privilegiado” para recibir las dosis.