Jorge Macri, el intendente de Vicente López; y el empresario Carlos De Narváez, hermano del diputado nacional, quedaron a un paso del sobreseimiento definitivo en una causa en la que están investigados por la construcción de un helipuerto utilizando documentación presuntamente apócrifa.

La querellante, Iris Di Giano, representante de la organización comunal “Vecinos en Defensa de Vicente López”, quedó con un pie y medio afuera del expediente.

Macri y De Narváez fueron sobreseídos. Y sólo falta un paso para que esa medida quede firme, porque fue consentida por la fiscalía y, al no haber querella, quedó en el umbral de la desvinculación definitiva de ambos.

En marzo de 2013 se inició la causa. “Como continuación de una gesta iniciada en 2004 por el controvertido Enrique ‘Japonés’ García, el Concejo Deliberante de Vicente López aprobó el 21 de diciembre de 2012 la construcción de helipuerto en la costa del municipio, parte de un negocio inmobiliario que incluye la edificación de una torre y un centro comercial”. El helipuerto, según admitió el Concejo Deliberante y denunció Di Giano, contaba con un aval de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). “Consultamos con el organismo y desconocían el expediente con el que supuestamente se hizo la autorización. No había número de expediente, no había número de nota. Directamente nos dijeron que nadie les había pedido ningún tipo de certificado”, explicó Di Giano.

Cuando la causa tramitaba ante la jueza federal de primera instancia Sandra Arroyo Salgado, la defensa de Jorge Macri, a cargo del abogado Ignacio Irurzun, alertó que Di Giano no era una damnificada en la causa y, en consecuencia, no podía ser querellante. El planteo fue rechazado, pero Irurzun apeló ante la Cámara Federal de San Martín, que en segunda instancia le dio la razón. Entonces quien apeló fue Di Giano, y la causa llegó a la Cámara de Casación.

En ese ínterin, Arroyo Salgado sobreseyó a Macri y De Narváez, y el fiscal subrogante Fernando Domínguez consintió el fallo. La causa parecía cerrada, con el intendente y el empresario a salvo de cualquier imputación penal. Pero Di Giano aprovechó que su separación de la causa no estaba firme y apeló el sobreseimiento: un verdadero laberinto.

La Sala Cuarta de la Cámara de Casación, finalmente, resolvió que Di Giano no puede volver a ser querellante. ¿Por qué? Porque no presentó un recurso a tiempo. La dirigente vecinalista argumentó que por un problema de notificaciones electrónicas fallidas no se había enterado de los plazos. Entonces apareció el Ministerio Público Fiscal para mantener la causa con vida: primero el fiscal Jorge Sica y ahora su colega ante la Casación, Javier De Luca, le pidieron a la Justicia que vuelva a aceptar a la representante de los vecinos de Vicente López como querellante.