La Legislatura de Tucumán aprobó una prórroga de la ley que subsidia el 25% de los sueldos de tres call center radicados en la provincia.
El gobernador José Alperovich destacó que “nos guste o no nos guste, eso representa a la Provincia un ingreso mensual como de 18 millones de pesos, que también mueve la economía”. “¿Cuántas industrias uno tiene que traer para tener seis mil empleos?”, se preguntó.
Desde la oposición sólo se escuchan cuestionamientos. Silvia Elías de Pérez (UCR) sostuvo que “es evidente que con el gobernador tenemos miradas distintas sobre lo que implica un ámbito de trabajo espectacular y del sentido del dinero en nuestras vidas”. “Para mí el dinero no es un fin en sí mismo, sino un medio para mejorar la calidad de vida de la gente y eso se hace, entre otras cosas, reglamentando las actividades productivas para garantizar condiciones mínimas de salud y seguridad”, agregó.
“Las simplificaciones del gobernador son insostenibles. Así como pretende hacernos creer que los ladrillos equivalen a salud, que el asfalto equivale a democracia y que un edificio nuevo para la Legislatura significa mayor calidad institucional, en el caso de los call center intenta desviar la atención del debate central, que no es otra cosa que si estamos dispuestos a subvencionar actividades que atentan contra la salud de nuestros jóvenes o no”, argumentó Elías de Pérez.