La Legislatura de Córdoba quedó envuelta en una fuerte polémica como consecuencia de la muerte de un joven a manos de barras bravas de La Fiel (club Talleres) en un camping de Villa Carlos Paz, tras discutir por una mesa.
Los legisladores, en mayo pasado, homenajearon a La Fiel por su “compromiso” con la no violencia en el fútbol. Ya en aquella oportunidad, y por el fuerte rechazo que la iniciativa tuvo en los medios nacionales, el gobernador José Manuel De la Sota, por entonces aspirante a una candidatura presidencial, había dicho que el homenaje le parecía “una locura”.
El tributo había surgido, curiosamente, del bloque Unión por Córdoba, es decir del oficialismo, que ahora queda en el ojo de la tormenta, aunque el juecismo y el radicalismo, salvo expresiones individuales, no objetaron aquella sesión de mayo pasado.
Puntualmente el proyecto de homenaje a los barras bravas de Talleres fue del presidente provisorio de la Cámara, o sea de la tercera autoridad de la provincia, el peronista Carlos Alesandri, sobre quien recaen ahora las miradas más severas.
La polémica promete oscurecer la discusión por el Presupuesto 2014, cuya primera lectura debe hacerse este miércoles.