Otros tres testigos constataron que el ex sargento Juan Carlos Bayarri padecía graves lesiones, presuntamente producto de torturas, cuando lo revisaron tras ser detenido en 1991 como supuesto autor del secuestro del entonces joven empresario Mauricio Macri.

El profesor Primitivo Burgo, médico que cumplía funciones en el Cuerpo Médico Forense a fines de 1991, confirmó la existencia de una lesión auditiva que presentaba Bayarri cuando lo revisó, pero además, recordó que el juez que por entonces investigaba el secuestro de Macri, el fallecido Nerio Bonifati, obstaculizó la presentación de informes sobre otras lesiones que hacían suponer la aplicación de picana eléctrica.

El ex médico del Servicio Penitenciario Federal, José Cohen, quien se desempeñaba en la Unidad Penal 28 (calabozos del Palacio de Tribunales) corroboró las lesiones que presentaba Bayarri cuando fue alojado en ese lugar y reconoció como propia la firma en un acta médica donde dejó constancia del resultado de la revisión del 24 de noviembre de 1991, poco después de que el juez Bonifatti indagara al detenido.

Finalmente, la fonoaudióloga María José Sanguinetti, quien desde 1991 y hasta hoy trabaja en el Cuerpo Médico Forense, certificó la disminución auditiva que padecía Bayarri cuando lo revisó, y afirmó que podría ser a consecuencia de una perforación de tímpano.

La semana pasada, media docena de testigos confirmaron ante un tribunal oral que Bayarri, quien estuvo 13 años detenido por el secuestro de Macri en 1991 y luego fue liberado, sufrió torturas que dejaron lesiones en su cuerpo.

El juicio está a cargo del tribunal oral número 19, integrado por los jueces Horacio Barberis, Raúl Llanos y Alberto Ravazzoli, con la intervención del fiscal Eduardo Marina.

En el banquillo están los ex policías Carlos Alberto Sablich, Carlos Jacinto Gutiérrez, Alberto Alejandro Armentano y Julio Roberto Ontivero, y al ex secretario judicial Eduardo Albano Larrea, quien se encontraba al frente de la Secretaría Número 145 del Juzgado de Instrucción 25 a cargo del ya fallecido Nerio Bonifati.

Todos comparecen acusados por “privación ilegal de la libertad agravada y tormentos” en perjuicio de Juan Carlos y Juan José Bayarri, padre (fallecido) del único querellante en la causa.