La Legislatura cordobesa convirtió en ley el Programa Primer Paso (PPP), con el voto favorable de casi todos los bloques, que lo consideraron una herramienta útil para facilitar el ingreso de los jóvenes al mercado laboral.
La legisladora delasotista María Amelia Chiófalo dijo que “es la cristalización de una política pública”, y recordó que el PPP comenzó en 1999, en el primer gobierno de De la Sota.
La juecista Nancy Lizzul elogió el programa y destacó el rol del sector privado, que según las estadísticas oficiales, tomó de manera definitiva al 74 por ciento de los trabajadores ingresados por el PPP.
Por su parte, el radical Luis Brouwer de Koning afirmó que “el desempleo juvenil ha llegado a límites insospechados”, y hasta le pidió al peronismo el retorno del plan “Volver al Trabajo”, otro programa lanzado por De la Sota en 1999, destinado a los mayores de 45 años que habían perdido su empleo.
Javier Pretto (PRO), Fernando Salvi (Frente para la Victoria) y Roberto Birri (Partido Socialista) enfatizaron en el carácter inclusivo y que favorece a los trabajadores jóvenes. Birri dijo que “es uno de los pocos logros que han tenido los gobiernos de Unión por Córdoba”.
No hablaron pero habían anticipado su apoyo Aurelio García Elorrio (Encuentro Vecinal Córdoba) y Rubén Borello (Frente Renovador).
Sólo se opuso al proyecto original Cintia Frencia (Frente de Izquierda), quien presentó un despacho en disidencia reclamando una mayor formalidad en la relación laboral.