Nuevamente, el jefe de Gabinete volvió a apuntar contra la figura de Diego Lagomarsino en el caso Nisman y reiteró que en cualquier país del mundo estaría detenido tras haberle facilitado el arma al fallecido fiscal.
En el marco de sus habituales encuentros con la prensa previo a hacer su ingreso a Casa de Gobierno, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, se refirió una vez más a la investigación por la muerte del fiscal Alberto Nisman y, más precisamente, opinó sobre la situación del técnico informático Diego Lagomarsino.
“A mí me da la sensación que en cualquier país del mundo alguien que va a facilitar un arma con la cual se dio muerte a una persona -no voy a calificar hasta que no se conozca científicamente- estaría detenido; no tengo ninguna duda de eso”, expresó Fernández.
Además, el jefe de Gabinete apuntó contra el abogado defensor de Lagomarsino, Maximiliano Rusconi, al insinuar que lo que están haciendo es armarle una explicación teórica que se parezca a una realidad ficticia. “Ahí la elección del doctor Rusconi surte efecto como un abogado caro que no se sabe quién lo paga, que se dedica a enseñarle a este señor lo que no tiene que decir o cómo lo tiene que decir”, opinó.
Por último y en alusión al allanamiento ordenado por la jueza Fabiana Palmaghini al domicilio del técnico informático realizado en el día de ayer, el funcionario nacional señaló que “alguien que lleva el arma que termina siendo el arma que da muerte al fiscal que no haya sido evaluado con anterioridad llamaba la atención”.
“No se puede dejar de lado este elemento como para no evaluarlo y profundizar más la investigación”, agregó.