La legisladora del massismo expresó su desacuerdo con la posibilidad de que se lleve adelante una gran interna opositora de cara a las elecciones y volvió a marcar sus diferencias con Francisco De Narváez. Confirmó, además, su precandidatura para la gobernación bonaerense.
La precandidata a gobernadora bonaerense por el Frente Renovador, Mónica López, intentó dar por finalizados los cruces que mantiene con el competidor de su espacio, Francisco De Narváez, de cara a las próximas elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), aunque para ello minimizó la figura de su rival en la interna.
“Le estamos dando entidad y no la tiene… No voy a entrar en polémica con De Narváez. No me suma y no lo merece él”, manifestó la diputada provincial bonaerense en diálogo con Radio Blue, quien además ratificó que no declinará de su precandidatura ya que tampoco Sergio Massa le pidió que lo hiciera.
En referencia a la realización de una hipotética alianza electoral con el PRO, López expresó su desacuerdo con que haya una PASO ampliada en ese sentido, y sostuvo que el Frente Renovador no tiene nada que ver tanto con la fuerza liderada por Mauricio Macri, así como tampoco con Daniel Scioli.
“Me paro en medio del cuarto oscuro y veo la opción Scioli y Macri. Yo no estoy planteada ni en un extremo ni en otro; no tenemos nada que ver con el PRO ni con Scioli”, señaló la legisladora massista, que también aprovechó para arremeter contra el PRO al opinar que no tiene concepción ideológica y que tampoco plantea temas de agenda a nivel nacional o provincial.