La Legislatura de Córdoba aprobó por unanimidad la llamada Ley de Talles, por la que se obliga a los fabricantes y vendedores de vestimenta y calzado a disponer de indumentarias de diferentes medidas. La nueva ley tiene por objeto «evitar situaciones de discriminación y promover la salud de la población».
En su articulado, Ley de Talles determina que las empresas fabricantes de indumentaria radicadas en la provincia de Córdoba deberán confeccionar modelos «en todos los talles necesarios».
Los comercios que vendan indumentaria en el territorio provincial «deben tener en existencia todos los talles» a excepción de ventas de productos discontinuos, liquidaciones de temporada o por cierre del negocio.
El Ministerio de Industria, Comercio, Minería y Desarrollo Científico Tecnológico será el encargado de establecer el sistema de talles numéricos conforme a las medidas antropométricas de la población, así como de implementar un sistema de control y supervisión de la norma, además de aplicar sanciones.
El proyecto sancionado otorga al Poder Ejecutivo un plazo de 180 días para que sea reglamentado tras su promulgación.
Durante el debate en la Cámara, asistieron al recinto diferentes empresarios vinculados a la industria textil, la moda y el diseño, junto a asociaciones que apoyaron esta iniciativa.
La legisladora que impulsó el proyecto original fue Nadia Fernández, del bloque oficialista Unión por Córdoba.