El próximo gobernador de Entre Ríos, el kirchnerista Gustavo Bordet, tendrá una Cámara de Diputados amigable durante cuatro años, de acuerdo con los resultados de las elecciones del domingo pasado y las condiciones de gobernabilidad que establece la Constitución de esa provincia, y al mismo tiempo un Senado más complicado.
Bordet ganó por 2,8 puntos porcentuales al macrista Alfredo De Ángeli la Gobernación provincial.
El ajustado resultado se trasladó a los tramos legislativos. Para la Cámara Alta, el Frente para la Victoria se impuso en ocho departamentos, al igual que Cambiemos, sumando un senador en cada uno ambas coaliciones. El senador 17 le correspondió a la Unión Popular.
La Constitución de Entre Ríos establece en el artículo 91 que “los diputados serán elegidos directamente por el pueblo de la Provincia, en distrito único, por un sistema de representación proporcional; pero que asegure al partido mayoritario la mayoría absoluta de la representación”.
Por ello, pese a ganar apenas por 42,31 a 40,25 por ciento en el tramo de Diputados, el Frente para la Victoria tendrá 18 bancas en la Cámara Baja. Cambiemos sumará doce y UNA, cuatro.
De esta manera, los proyectos oficialistas no encontrarán dificultades en Diputados, pero estarán sometidos a la negociación permanente en el Senado.