Alejandro Grandinetti compartió un informe elaborado en base a una investigación de la Organización Mundial de la Salud, en el cual se destaca que en Latinoamérica y Argentina la posibilidad de morir por un delito es 84 veces mayor que en Europa.
“Todo esto surge como resultado del nefasto negocio de las armas ilegales en el mundo. Se trata de un delito internacional que mueve más de un billón de dólares por año”, expresó el diputado nacional del Frente Renovador, Alejandro Grandinetti, quien agregó que a nivel internacional, la mitad de las muertes violentas se producen en el continente americano y que los niveles de violencia armada en algunos países exentos de conflictos bélicos se asemejan a los de las zonas en guerra.
Asimismo, el informe reconoce que la posibilidad de que un joven nacido en Argentina o en el resto de Latinoamérica sea víctima de un homicidio por el uso de un arma de fuego, es 84 veces mayor a la de un europeo, y 115 veces superior a la de un escocés, húngaro, inglés, austríaco, japonés o irlandés, por nombrar algunos casos. Además, se destaca que un total del 25 por ciento de todas las muertes violentas ocurren en tan sólo 14 países, con una tasa anual promedio superior a 30 muertes violentas por 100.000 habitantes, de las cuales la mitad se encuentra en nuestro continente.
En ese sentido, el legislador massista destacó la importancia de la media sanción que obtuvo el proyecto para la modificación del Código Penal Nacional que, entre otras cuestiones, busca endurecer penas por tenencia y portación de armas.
“Con la aprobación de esa modificación se demuestra a la sociedad que no se va a permitir que aquellos que pongan en riesgo la vida de los ciudadanos con armas ilegales vayan a quedar impunes y que, muy probablemente, terminarán presos, aunque no hayan consumado acto de violencia asociada a esa arma”, enfatizó el vicepresidente del bloque del Frente Renovador, quien también celebró la aprobación del “Régimen de Protección a las Víctimas de Delitos” que había sido impulsado por su espacio.
