Los datos surgen a partir de un sondeo realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM) para conocer el nivel de aprobación y conocimiento de los ciudadanos argentinos ante las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del próximo 13 de agosto. El trabajo, además, destaca que el Estado nacional gasta casi 3.000 millones de pesos en celebrar internas que a la mayoría del pueblo le resultan “inútiles”.
Según precisaron, el muestreo se efectuó en el ámbito geográfico de la Capital Federal, Gran Buenos Aires, Córdoba, Mar del Plata, Rosario, Mendoza y Tucumán, desde el 15 de mayo hasta el 15 de junio pasado sobre un total de 2863 entrevistados de entre 16 y 65 años de edad. Además, el 44 por ciento de los datos se obtuvo a través de un cuestionario efectuado en la vía pública, y el 66 por ciento restante a partir de encuestas telefónicas y formularios online.
Asimismo se señaló que si bien hay diferencias sustanciales en cuanto al conocimiento que los diferentes segmentos etarios poseen de esos comicios, el resultado final arroja que el 69,6 por ciento de los argentinos desacreditan su celebración.
La encuesta de INDECOM, en detalle, determinó que un 84 por ciento de los jóvenes de entre 16 a 25 años ni siquiera entienden el objetivo de esas internas, y que del 16 por ciento que sí conoce su fin, sólo el 6,4 por ciento las aprueba.
Por el lado de la franja que va entre los 26 y los 40 años, el 60 por ciento de los encuestados manifestó tener conocimiento, aunque sólo el 13 por ciento dijo estar de acuerdo con su realización. Finalmente, en el segmento que va entre los 41 y los 65 años, un 80 por ciento afirmó entender el objetivo de esas elecciones pero el 69 por ciento desacredita su celebración.
El estudio también señaló que sobre el 100 por ciento de los casos que manifestaron desconocer el verdadero objetivo de las elecciones, el 64 por ciento reconoció que no se interiorizó demasiado porque las considera “elecciones que no son determinantes”; y el 36 por ciento restante atribuyó su “falta de conocimiento a una mala campaña de difusión”.
En relación a los argumentos planteados por los detractores de las PASO, se destaca que el 84 por ciento afirmó que “la democracia interna de los partidos políticos la deben pagar sus afiliados y no la totalidad de la población” porque consideran que “es incomprensible gastar tantos millones de pesos, que bien podrían utilizarse con otros fines, sólo para elegir a los candidatos de una elección”.
En ese sentido, INDECOM señaló que “el gasto total para las PASO equivale a la construcción de unas 100 escuelas, o 1.000 jardines de infantes , o unos 20 hospitales de alta complejidad, o 600 salas de primeros auxilios, o 200 tomógrafos, o 3.000 ambulancias, o 100 mil domos de seguridad instalados, o 6.000 patrulleros, entre otros”.
Por otra parte, un 11 por ciento también se mostró disconforme con las primarias porque dicen que “los afiliados de los partidos que no dirimen internas pueden utilizarlas para votar contra sus contrincantes y tratar de sacarlos del escenario electoral”, mientras que un 5 por ciento de los consultados manifestó que no le interesan esa elecciones por la incomodidad que les genera “ir obligados a las urnas sin tener ninguna pertenencia partidaria”.
“La postura de la mayoría de los ciudadanos es muy coherente si se tiene en cuenta que se destina una cifra exorbitante de dinero del Estado para celebrar elecciones que terminarán siendo apenas un simple sondeo de opinión de cara a las legislativas del mes de octubre”, expresó el titular del organismo estadístico que realizó el trabajo, Miguel Calvete.