Las nuevas normas que se buscan incorporar con el proyecto disponen, entre otras cosas, que «se hará uso de las armas de fuego cuando resulten ineficaces otros medios no violentos»; en casos como «defensa propia o de otras personas, o de peligro inminente de muerte o de lesiones graves», y «para impedir la comisión de un delito particularmente grave, que presente peligro inminente para la vida o la integridad física de las personas». La medida también se aplica para detener a quien «represente peligro inminente y oponga resistencia a la autoridad», y «para impedir la fuga de quien represente ese peligro inminente», resaltó el legislador.
«El Gobernador, como máxima autoridad de las fuerzas de seguridad provinciales, tiene el deber de llevar adelante acciones concretas para disminuir la inseguridad que padecen a diario los cordobeses a causa de la creciente ola delictiva que afecta a toda la Provincia», reclamó Bee Sellares.
“Se torna imprescindible dotar al personal policial de nuevas herramientas para que puedan cumplir con los deberes que les impone la ley, para poder servir a su comunidad y protegerla contra actos ilegales, en consonancia con el alto grado de responsabilidad exigido por su profesión que les impone defender la vida, la libertad y la propiedad, y prevenir e interrumpir actos delictivos o contravencionales”, agregó.