En el regreso a la actividad de los diputados provinciales, Bracamonte sostuvo que “fue un abuso y una vergüenza la cantidad de recursos públicos que se han usado, sin esconderse y hasta última hora, incluso por el propio gobernador, para cambiar o comprar voluntades”. “A pesar de eso, la gente votó menos legisladores del oficialismo. Quiere control”, agregó.
“Esta elección fue un llamado de atención muy fuerte para ellos, porque el peronismo se ha puesto de pie y se está preparando para recuperar el poder, como es el objeto de todo partido político”, dijo además el diputado justicialista Alberto Matuk. “Las colectoras son un escándalo”, señaló Matuk.
Por el oficialismo, el presidente del bloque, Alberto Bernis, reclamó a la oposición que acepte los resultados de las últimas elecciones provinciales.
“Todos somos responsables de algún desprestigio o virtud que se pueda tener en la gestión pública”, afirmó Bernis.
En la sesión previa al fin de semana, se aprobó una ley que avala la sesión de tierras por parte del ingenio Ledesma al Estado provincial, y tomaron estado parlamentario, entre otros proyectos, un pedido de autorización del gobierno para tomar un crédito por 75 millones de dólares para la terminación de la obra del tren, y el decreto que firmó el gobernador Morales para pasar a planta permanente a 5.800 contratados.