La Comisión Episcopal de Pastoral Social le solicitó al Gobierno de Mauricio Macri que declare la emergencia alimentaria y nutricional en todo el territorio nacional.
“Los obispos de la Comisión Episcopal de Pastoral Social decíamos cuan conmovidos estábamos al advertir que el grado de desigualdad social en que estamos sumergidos es muy grave y peligrosísimo para nuestro país… En estos meses, adicionalmente, advertimos que, ante el severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado del precio de los alimentos de la canasta básica, nos encontramos en una situación de emergencia alimentaria y nutricional, que afecta esencialmente a los más vulnerables, en especial a los pequeños”, advirtieron los religiosos a través de un comunicado.
En ese sentido, consideraron que se debe implementar de manera “urgente” una Canasta Básica de Primera Infancia con productos esenciales que puedan ser distribuidos gratuitamente y/o a costo subsidiado para garantizar la seguridad alimentaria, nutricional, la salud y los cuidados de calidad de niñas y niños, así como también que se incremente el presupuesto destinado a los comedores y a las huertas escolares, comunitarias y familiares, y a emprendimientos de la agricultura familiar y social.
“Si bien el Estado nacional está asistiendo con mayor ayuda alimentaria, no sería suficiente para paliar las deficiencias de este tiempo”, se agregó en el escrito difundido por la Comisión que preside el obispo Jorge Lugones.