Como primera parada de su viaje, el Presidente Alberto Fernández visitó en Santiago del Estero el departamento de Robles, donde en compañía del mandatario local, Gerardo Zamora, realizó el corte de cinta de Mega Alfalfa Argentina (MAA), una empresa agroindustrial que produce forraje para ganado y también para consumo interno y externo.
A su término, se trasladó a la ciudad capital para supervisar las obras de ampliación de colectores, redes cloacales y conexionado extra domiciliario que beneficiará a unos 37.600 habitantes directos y a 180 mil indirectos, con una cobertura del 100% de desagües cloacales (esos trabajos demandaron una inversión estimada de 2.267 millones de pesos).
Acto seguido, el Jefe de Estado encabezó la puesta en valor de la Escuela del Centenario, que requirió una inversión de 226 millones de pesos y cuyas aulas, patio y microestadio fueron refaccionados y ampliados integralmente.
Según se aclaró oficialmente, las obras de restauración del edificio -declarado Monumento Histórico Nacional- estuvieron paralizadas desde abril del año pasado ante la falta de giro de fondos por parte de la gestión de Mauricio Macri.
Por último, el Presidente tomó un vuelo desde tierras santiagueñas con destino a Tucumán, donde también fue recibido en ese caso por el gobernador local, Juan Manzur, quien curiosamente y pese a ser médico de profesión, chocó sus puños para saludar al primer mandatario en momentos en los que se desaconseja evitar contacto físico con personas ajenas a las del propio entorno.
Durante su estancia en ese territorio, Fernández firmará una serie de convenios para la realización de obras en esa provincia, y recorrerá una empresa automotriz y una planta de tratamiento de líquidos cloacales.