El Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires resolvió que los grandes usuarios bonaerenses -pymes, comercios e industrias- que se vieron afectados por el impacto de la pandemia del coronavirus podrán posponer el pago de la potencia contratada y abonar la factura en un plan de cuotas. Al mismo tiempo y en caso de que sea necesario, también contarán con la facultad de solicitar su recategorización tarifaria a una inferior.
Según indicaron desde la administración de Axel Kicillof, la Resolución 2020-575-GDEBA, retroactiva a marzo del 2020, se implementará en conjunto con el Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica provincial, quien indicará aquellas actividades económicas y localizaciones que por consecuencia de la pandemia hayan disminuido sus actividades y, por consiguiente, el consumo de energía o potencia contratada. En esos casos -aclararon- se establecerá un tratamiento diferencial en la facturación que contemplará a la potencia realmente registrada o consumida.
Asimismo, la Resolución ofrece la posibilidad de abonar en cuotas sus obligaciones o, incluso, categorizarse sin costo en niveles tarifarios menores.